Empresarios venezolanos pueden convertir a Curazao en un trampolín para llegar con sus productos a Europa
Miembro de la Oficina de Turismo de Willemstad y CEO de Kura Botanica Hotel, Edward Suares destaca las oportunidades que ofrece la isla a los inversionistas de Venezuela
La puerta de entrada al Caribe y más allá. El empresario turístico curazoleño Edward Suares destaca que Curazao puede ser un hub o punto de conexión para inversionistas y emprendedores venezolanos que aspiran a aterrizar en el mercado europeo.
“Curazao puede fungir como un hub entre Sudamérica, Venezuela y Europa”, comentó Suares a Crónicas del Caribe, al evaluar las oportunidades de negocios que asoman en el horizonte tras la reapertura de las fronteras.
Con una amplia trayectoria en el sector hotelero y miembro de la Oficina de Turismo de Curazao, Suares resalta entre las virtudes de la isla su estabilidad política, por formar parte del Reino de los Países Bajos, y multiculturalidad, factores que pueden facilitar la concreción de alianzas comerciales con la finalidad de exportar productos a Europa.
“Los empresarios venezolanos pueden invertir en empresas y negocios internacionales en Curazao. Los lazos entre Curazao y Venezuela siempre han sido muy fuertes y hay muchas oportunidades para invertir aquí, incluyendo el sector financiero”, enfatiza el CEO de Kura Botanica Hotel.
Sin visa
La exigencia de la visa caribeña se ha convertido en el último obstáculo que deben superar los venezolanos para ingresar a la isla. Suares enfatiza la necesidad de afinar los convenios entre Venezuela y Curazao, para levantar ese requisito.
Considera que al eliminar este documento, Willemstad puede ser también un lugar de encuentro para la familia venezolana, reuniendo a aquellos que hoy están desperdigados por todo el mundo a pocos kilómetros de su hogar. Agrega que “hay muchos jets privados que podrían estacionar en Curazao y buscar a sus dueños en Venezuela. En fin, un hub para tener más cerca a los venezolanos”.
Nuevo destino
“Después del cierre de la frontera, el costo de frutas y vegetales subió enormemente”, recuerda Suares. Desde el 8 de mayo, los barcos volvieron a zarpar desde el estado Falcón para llevar alimentos a los consumidores curazoleños, intercambio que debe ayudar a mitigar la inflación.
La reactivación del comercio bilateral ha entusiasmado a los empresarios venezolanos, que buscan expandir sus mercados. “Curazao es un lugar de mucha importación, por eso existen muchas oportunidades para los empresarios venezolanos”, finalizó Suares.
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