Pescadores y empresarios del estado Falcón exigen abrir un canal comercial con Curazao
Vecinos de La Vela de Coro realizaron una protesta a pocos días de cumplirse tres años del cierre de la frontera con el Caribe Neerlandés
El cierre de las fronteras con las islas de Aruba, Bonaire y Curazao ha golpeado fuertemente la economía del estado Falcón, al occidente de Venezuela. La suspensión del intercambio con el Caribe Neerlandés ha impulsado la migración ilegal, el cierre de navieras y establecimientos comerciales, y la pérdida de las embarcaciones que antes transportaban distintos productos al mercado flotante de Curazao.
Cansados de esperar por el gobierno de Nicolás Maduro, marineros, pescadores y dueños de embarcaciones se concentraron este lunes 14 de febrero en la Plaza Bolivar de La Vela, frente a la Cámara Municipal, para exigirle a las autoridades locales un canal comercial entre Curazao y Falcón.
El vicepresidente de la Asociación Barquitos de Venezuela, Elis Quiñones, de 64 años, encabezó la protesta contra el cierre de fronteras y solicitó una reunión formal con el gobernador del estado Falcón, Víctor Clark, con el fin de acelerar las negociaciones sobre la reapertura gradual.
Llamado al gobernador
“Queremos conversar con el gobernador para ver qué repuesta tiene, desde hace mucho tiempo atrás hemos solicitado la audiencia y nunca nos la han dado”, manifestó Quiñones.
El dirigente gremial explicó que “estamos solicitando el canal comercial entre La Vela y Curazao para que se normalice la comercialización y nuestro pueblo de La Vela”.
Quiñones denunció que las promesas hechas en 2021 por el Parlamento de mayoría chavista, sobre la agilización de trámites migratorios y renovación de documentos marinos, no se han cumplido.
“El 95% de los agremiados está con los documentos vencidos, hemos solicitado que se haga una excepción para la renovación de pasaportes y solicitar nuevos, sabemos que tiene un costo, necesitamos que nos atiendan, nosotros pagaremos nuestro arancel, pero hasta ahora ninguna respuesta”, comentó.
Hundidos
De 31 embarcaciones varadas en el muelle pesquero de La Vela, 21 están en condiciones para retomar los fletes cargados de frutas y hortalizas hasta el mercado flotante de Curazao, informaron los manifestantes.
La reparación de las pequeñas embarcaciones tiene un costo de 1 mil dólares, mientras que aquellas con mayor capacidad demandan una inversión superior a los 5 mil dólares para su mantenimiento.
En las condiciones actuales, los dueños de las navíos no tienen acceso a créditos privados. Para buscar una solución, plantean consignar un proyecto ante el Parlamento con el fin de conseguir subsidios que les permitan prepararse para retomar el timón.
“Para encontrar mil dólares tenemos que hacer de tripas corazón porque estamos inactivos”, expresó Quiñones.
Situación crítica
Alexander Guanipa, un marinero de 27 años, rechazó las razones esgrimidas por el régimen chavistas para cerrar la frontera con el Caribe Neerlandés. “Dijeron que iban a atacar a Venezuela, era falso, esas islas son nuestras hermanas”, aseguró Guanipa, quien regularmente viajaba a Curazao para ofrecer los productos venezolanos.
Tras el cierre de la frontera, Guanipa y su familia sobreviven por la pesca y las remesas de algunos familiares. “Amigos que están en la isla nos envían un poco de dinero, hoy la gente tiene desespero para tener el pan de cada día, es difícil”, narra.
Las preocupación por la falta de comida y la capacidad para cubrir las necesidades básicas en el hogar de Osman Romero, de 61 años de edad, se han duplicado en los últimos 3 años.
“Tengo 42 años navegando para la Curazao, cargaba frutas y llevaba las cuentas, y ahora mi vida cambió radicalmente, me he enfermado, ya no hago casi nada, nunca había pasado tantas necesidades”, declaró Osman Romero, de 61 años, para Crónicas del Caribe.
El pasaporte y los documentos de navegación de Romero están próximos a vencerse. Dice que no tiene el dinero para renovar sus papeles y teme que al abrirse las fronteras, pierda la oportunidad de retomar su antigua vida.
Autoridades locales
La concentración frente a la Alcaldía de La Vela fue atendida por el equipo del alcalde chavista Rubén Molina, quien escuchó el clamor de los presentes y se comprometió a apoyar a los manifestantes.
Molina señala que el cierre de la frontera responde a un conflicto geopolítico internacional. “Con mucho compromiso recibimos la petición que ellos consignan, serviremos de puente para esta audiencia (con el gobernador), estamos con el pueblo, pero tenemos que entender que las decisiones son internacionales”, argumentó.
Días atrás el gobernador de Falcón, Víctor Clark, indicó que el gobierno de Curazao está ávido de retomar el intercambio comercial con Venezuela. “Hemos venido recibiendo un conjunto de planteamientos e iniciativas por parte de la isla de Curazao, ellos tienen el mayor interés de iniciar en el corto tiempo sus actividades con Venezuela, específicamente con Falcón”, aseveró el mandatario regional.
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