Defensores de DDHH solicitan a los parlamentos del Reino de Países Bajos prestar atención especial a los migrantes venezolanos en las islas

Los activistas esperan que la Consulta Interparlamentaria que comienza este martes 28 de febrero, tome medidas para superar los abusos que siguen sufriendo los extranjeros que buscan protección en el Caribe Neerlandés

Las organizaciones de derechos humanos Amnistía Internacional (AI), Refugee Work Holanda y Human Rights Defense Curazao (HRDC) enviaron una carta a los presidentes de los parlamentos de Países Bajos, Curazao, Aruba y Sint Maarten para que presten atención especial a los refugiados y “migrantes en crisis” de Venezuela que buscan “seguridad y estabilidad” en las islas del Caribe Neerlandés.

Las ONG extendieron esta solicitud con motivo de la Consulta Interparlamentaria del Reino de Países Bajos (IPKO), que comienza este 28 de febrero en Willemstad y que tendrá a la migración como uno de los temas principales de la agenda.

“Los extranjeros son bienvenidos cuando traen dinero como turistas o inversionistas, pero no cuando nos piden protección o trabajar aquí temporal o permanentemente, para ganarse la vida y enviar dinero a la familia que queda atrás. Las personas con un alto nivel educativo, como médicos, ingenieros y personal de IT (Tecnologías de Información), también están excluidas, mientras que Curazao carece de suficiente experiencia y trabajadores calificados debido al envejecimiento de la población y la huida de sus propios curazoleños a los Países Bajos o a Bonaire”, resalta HRDC a través de un comunicado publicado este 27 de febrero.

En el texto, los defensores de DDHH agregan que “las personas que trabajan en la construcción, la restauración, el cuidado de ancianos y la agricultura también son encarceladas y deportadas sin piedad. Miles de ellos están condenados a esconderse durante años y a ocupar una posición inferior, mal pagada y explotada en el mercado laboral”.

“Cualquier caso de discriminación y explotación es, desde luego, reprobable, ejemplos conmovedores son con demasiada frecuencia los que atañen al triste destino de la mujer venezolana. Por lo tanto, no sorprende que Curazao todavía esté en la lista negra del gobierno de Estados Unidos y recientemente haya sido degradado por su manejo inadecuado de problemas inaceptables de tráfico y trata de personas”, señala HRDC.

Grave error

La ONG curazoleña critica al gobierno de Países Bajos por “financiar la renovación de los infames ‘cuarteles de extranjeros’”, advirtiendo que “la gente se equivoca gravemente al pensar que esto ha llevado a una recepción digna de los indocumentados encarcelados, de acuerdo con los estándares humanitarios internacionales”.

“Continúan privados de su libertad en recintos penitenciarios, detrás de alambres de púas y en áreas restringidas, bajo un régimen penitenciario. El acceso de los encargados de HRDC y de nuestros abogados sigue siendo arbitrario con demasiada frecuencia”. Alertan que aunque el gobierno de Curazao afirma ante los tribunales que desarrolla “programas de día completo de relajación y deportes” para los migrantes detenidos, “aún no es una realidad en la práctica”.

HRDC suscribe el último informe elaborado por AI, que arrojó como conclusión que la situación de los migrantes venezolanos que buscan protección en Curazao no ha mejorado de forma sustancial. “A pesar de los pequeños pasos que han dado las autoridades de Curazao, éstas continúan negando protección a las personas venezolanas, entre ellas niños y niñas, y las siguen deteniendo automáticamente en condiciones inhumanas”, aseveró Amnistía Internacional el pasado 7 de febrero.

Esperando que su demanda sea escuchada por los jefes de los parlamentos, HRDC “aboga desde el principio por un refugio humano adecuado, donde se puede esperar protección o residencia legal temporal en libertad”; y advierte que “el Reino de Países Bajos puede ser ridiculizado internacionalmente” si no actúa con unidad política y solidaridad para evitar las violaciones de los DDHH de los migrantes.