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El muralista venezolano Oscar Olivares llevó su arte ecológico a Aruba

El joven convierte tapas de plástico en verdaderas obras de arte. «Siempre hay oportunidades escondidas en cosas simples», afirma

Con pinceles en mano y una visión fresca, Oscar Olivares, un joven artista de Venezuela, ha llevado su creatividad más allá de las fronteras. Así contó su historia: desde los primeros dibujos sobre fútbol en su niñez hasta convertirse en un muralista que defiende la sostenibilidad.

Este viaje artístico lo ha guiado por varios países, y Aruba es el nuevo lienzo que ha elegido para plasmar su arte. La conversación con Olivares revela no solo la destreza de un artista, sino también la profundidad de su compromiso con la sostenibilidad.

«Mi carrera empezó muy temprano, siempre me ha gustado dibujar, lo que más me apasiona es crear obras de arte», compartió Olivares, remontándose a sus primeras incursiones artísticas. A los 11 años, comenzó a plasmar su pasión por el fútbol en sus dibujos, pero su perspectiva artística dio un giro significativo en 2019, cuando abrazó el puntillismo y se sumergió en el mundo del arte ecológico.

En ese mismo año, se presentó la oportunidad de colaborar con una ONG llamada Conspira y la alcaldía de El Hatillo para crear el primer mural ecológico de Venezuela, una majestuosa obra de 45 metros compuesta exclusivamente por tapas de plástico recicladas, ubicada en la ciudad de Caracas.

Por el mundo

El muralista de 27 años, que ha extendido su huella artística con 23 murales en países como Aruba, Arabia Saudita, Francia y México, compartió detalles emocionantes sobre sus proyectos internacionales. Desde llenar una escuela completa con 100.000 tapas en México hasta presentar una obra en el carrusel del Louvre en Francia, Olivares ha llevado su mensaje ecológico a distintos rincones del mundo.

Próximamente, el joven venezolano viajará a Italia y Brasil para realizar su próximo proyecto y seguir elevando la conciencia ecológica a través del arte.

Olivares compartió su perspectiva, destacando su deseo de demostrar al mundo que aquello que a menudo se percibe como desecho tiene el potencial de convertirse en una valiosa fuente de oportunidades. «Siempre hay oportunidades escondidas en cosas simples», expresó el muralista, centrando su atención en la habilidad de transformar elementos cotidianos, como las tapas de plástico, en formas artísticas distintivas y cargadas de significado.

Olivares subraya la colaboración comunitaria en sus proyectos, donde cada obra involucra a artistas locales, recicladores y empresas de reciclaje. Resalta que cada persona en este proceso se convierte en parte esencial de su arte. La autenticidad es fundamental en su proceso creativo, expresando genuinamente su perspectiva en cada trazo. Siempre busca conectar con la cultura y las personas, estableciendo vínculos significativos con la comunidad que lo rodea.

En el mural que creó en Aruba, se aprecia un velero que navega en el mar bajo la puesta de sol. Olivares detalla que esta obra está inspirada en la playa, el mar y, especialmente, los hermosos atardeceres en la región, que quedaron reflejados en los vibrantes colores de las tapas naranjas, amarillas y en una mezcla de tonos azules.

Desde su llegada a Aruba, ha tejido un tapiz artístico que, más allá de impresionar visualmente, busca inspirar un cambio positivo. Su arte conecta con la autenticidad de Aruba, destacando el potencial creativo local. Al mostrar su mejor versión, invita a todos a unirse en la travesía de descubrimiento y apreciación del arte auténtico en el paraíso caribeño.

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